Martha Alicia Verdín Cedeño
51 años, Tenista de Mesa
Por Samantha Anaya
Ilustración por: Alejandra Artiga | @loopartdesign
Martha Alicia Verdín Cedeño, originaria de Ameca, Jalisco, es la segunda mejor atleta parapanamericana en tenis de mesa de México. El deporte se convirtió en un lugar seguro para ella, después de que el 5 de junio de 1998, a sus 27 años, sufrió un accidente automovilístico, a raíz del cual jamás podría volver a caminar.
A partir de este evento que marcó su vida, Martha comenzó a trabajar desde su casa, pero “el hecho de que era completamente dependiente de los demás me tenía sumida en una depresión muy fuerte, sentía que jamás iba a poder salir de esas cuatro paredes”.
Y aún cuando Martha se había resignado al hecho de que viviría con una discapacidad, decidió escuchar a su familia y amigos, así fue como comenzó con la rehabilitación física para fortalecer la parte superior de su cuerpo.
La suerte no es casualidad, pues el fisioterapeuta que la evaluó médicamente resultó ser el entrenador del equipo estatal de tenis de mesa. Ese día la invitó a quedarse a los entrenamientos del equipo, a lo cual Martha accedió.
Así fue como a sus 30 años, Martha inició su carrera como deportista. Después de su terapia física se quedaba a entrenar durante toda la mañana, tres días a la semana.
Un año después de que tomara la decisión de incorporarse al equipo jalisciense de tenis de mesa, acudió como observadora a una competencia en Chiapas. Ahí convivió con otras y otros atletas con diferentes discapacidades, lo que la llevó a darse cuenta de que el vivir con una discapacidad no tenía por qué limitar sus planes de vida: “Si ellas y ellos podían hacer grandes cosas como atletas, yo también podía”, se repitió una y otra vez.
En los Juegos Parapanamericanos de Lima 2019, Martha llegó a la final, en la que obtuvo la medalla de plata. A lo largo de su vida, ganó 56 medallas, 40 de ellas en competencias nacionales, y 16 en competencias internacionales.
En todas esas competencias, Martha Alicia llegó al medallero, pero su experiencia deportiva favorita ocurrió, en 2020, durante el Primer Abierto de Tenis de Mesa celebrado en Sonora.
En aquella competencia, Martha tuvo su primer juego como atleta profesional. Ella recuerda tener poca experiencia, en comparación con el resto de las participantes; sin embargo, se coronó como la segunda mejor atleta en tenis de mesa a nivel nacional. Ese fue uno de los mejores momentos de su vida después del accidente, pues se demostró a sí misma lo mucho que puede lograr como atleta: “Ese día comencé a confiar de nuevo en mí”.
Martha asegura que el deporte es una gran vía de escape para lidiar con los problemas, además de ser gratificante. Por ello, alienta a las niñas y adolescentes con o sin discapacidad que sueñan con ser atletas, pero más que nada, a confiar en sus capacidades porque: “esa es la clave para lograr grandes cosas, como deportistas, y como mujeres”.